El destacado grabador, pintor, escultor, fotógrafo y académico Francisco Rivera Scott presenta su obra reciente en la propuesta visual “Sistemas Progresivos Opuestos – Procesos Sucesivos II” en la Sala Viña del Mar, ubicada en calle Arlegui 683.
La muestra da cuenta de la pulcritud técnica del artista y de la agudeza conceptual que logra plasmar en su trabajo que es fruto del análisis permanente sobre la forma y el color en sus 50 años de trayectoria artística.
“Lo único que vemos los seres humanos son colores y formas de ríos, montañas, lámparas, sillas, mesas, casas, a las que le hemos puesto nombre para poder comunicarnos con los demás, por eso me interesa el juego de las formas en su máxima expresión y sus relaciones” señala Rivera Scott.
Las obras cuentas con relieves, trabajo de cortes y ensamblajes que evidencian la abstracción que adquiere cuerpo con el color que cobra protagonismo sobre la madera.
Para Rivera Scott “el tema está en la relación que se produce entre una y otra obra, porque existe un diálogo, un tránsito entre ellas y lo que no está en una está en otra. Eso enuncia un proceso, la mayoría son cuadradas y algunas son rectangulares, lo que significa un sistema, un método a través de una figura simétrica que voy desarticulando en sus propias estructuras”.
Se trata de una propuesta estética en que las formas se desmantelan, se intervienen unas a otras en un trabajo conceptualista de la pintura como un código de comunicación, cargada de significación y no de representación del mundo.
El artista trabaja con materiales alternativos a la tela, como la madera, para buscar un lenguaje inédito y propio, por lo que no le interesan las retrospectivas ya que prefiere exponer lo que tiene vigente en la actualidad.
“Mis obras tienen movimiento dependiendo del lugar desde el que se las mira, tienen un proceso de mutación y transformación, que es como la vida, la naturaleza es así”, destaca el artista.
Los procesos sucesivos compuestos refiere a que siempre trabajaba con los contrarios, con excavados en un cuadro y relieves en otro, para dar una imagen de complemento entre ellos, en una transformación constante.
Francisco Rivera Scott, se formó en la Escuela de Bellas Artes de Viña del Mar, que celebra 80 años de historia, bajo tutela del maestro Alemán Hans Soyka en pintura y dibujo, y en grabado de los maestros Carlos Hermosilla Álvarez y el Brasilero Roberto de la Mónica.
La exhibición cuenta con entrada liberada al público y permanecerá hasta el 13 de junio, de lunes a sábado de 10 a 20 horas, en la Sala Viña del Mar (Arlegui 683).