La exposición colectiva “Pampa Salitrera, Nuestra Mirada”, reúne el talento creativo de un grupo de 25 mujeres acuarelistas de segundo taller de la maestra Lea Kleiner, quienes registraron lugares designados Patrimonio de la Humanidad situados en el norte de Chile, los que se presentan en la Antesala y Sala Viña del Mar, ubicadas en calle Arlegui 683.
Las acuarelistas centraron la mirada a las salitreras Humberstone y Santa Laura y desarrollaron este proyecto desde la sutileza y profundidad del colorido de la zona calichera en cerca de 60 obras en la técnica húmedo en húmedo.
Esta muestra tiene como objetivo la puesta en valor y enseñanza que ofrece la acuarela como expresión artística contemporánea, junto con la divulgación de los espacios de patrimonio de la humanidad de nuestro país, fruto de largos meses de trabajo que parten con los estudios en terreno e investigación.
“Pampa Salitrera nos invita a un conjunto de evocaciones de todo tipo, no solamente a un tema de geografía física y de procesos productivos, sino a que me refiero en que allí hay mucho sacrificio y mucho dolor. El arte nos permite hacernos esas verdaderas preguntas que están pendientes sin respuestas aún y que en las obras uno puede encontrar espacios de respuestas, retazos de historias, de leyendas y grandes verdades”, señala Luis Bork, presidente de la Corporación Cultural de Viña del Mar.
A 47 kilómetros de Iquique se encuentra un lugar emblemático de la Era del Salitre, las ex oficinas Santiago Humberstone y Santa Laura, las que reviven en las obras de Pelagia Aldunate, Vivian Berdichewky, María Eugenia Bidegain, Jacqueline Blanchard, Gabriela Britzmann, Mariana Bronfman, Mercedes Calvo, Ana Cisternas, Gracia Cosmelli, Nella Domjan, Paola Fernandino, María Claudia García, Rosita Guzmán, Betsy Horsley, Mercedes Hurtado, Flavia Rebori, Johanna Reifschneider, Marta Viveros, Ute Von Schmieden, Maite Wainer, Érika Yañez y María José Alomar.
El patrimonio que dejó la industria salitrera da cuenta de un período de esplendor y contrastes que vivió la región entre fines del siglo XIX y comienzos del siglo XX: la mundialización del salitre que convirtió a toda una franja del Desierto de Atacama en el principal eje económico del país.
Luz María Villarroel, co-conductora del taller, destaca que “la muestra es fruto de una apuesta del taller por desarrollar un sistema de trabajo que significa tomar un tema de interés nacional y desarrollarlo mediante visitas a terreno, fotos y apuntes, para luego llevarlo a la acuarela dentro del taller… El tema central son los patrimonios nacionales; partimos por Valparaíso, seguimos con Pampa Salitrera, y en octubre de este año iniciaremos nuestro tercer proyecto dedicado a Chiloé, donde nos iremos a investigar las iglesias denominadas patrimonio de la Humanidad”.
Durante la Primera Guerra Mundial, Alemania logró producir salitre sintético, lo que determinó la decadencia del nitrato natural. Chile se vio obligado a disminuir su producción y en pocos años se produjo el cierre paulatino de las oficinas salitreras. Asimismo, el impacto de la crisis económica de 1930 puso fin al ciclo salitrero, y con ello, a una forma de vida única en el mundo, el de la pampa calichera.
El 16 de enero de 1970, Santiago Humberstone y Santa Laura fueron declaradas monumentos nacionales, y desde el 17 de julio de 2005, son Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO y están incluidas en la Lista de Patrimonios de la Humanidad en peligro.
Lea Kleiner Haas (1929, Zagreb, Croacia), pintora, grabadora y fotógrafa. Se radicó en Chile junto a su familia en 1939. Ingresó a la Escuela de Artes Aplicadas de la Universidad de Chile en 1947, recibiéndose como Decoradora de Interiores en 1950. Fue profesora del Departamento de Artes Plásticas de la Universidad de Chile entre 1952 y 1997. Destacó su labor en proyectos destinados a estimular la creación y el estudio de nuevas técnicas. Entre 1960 y 1970, integró el grupo Taller 99 de grabado donde fue discípula de Nemesio Antúnez y Eduardo Vilches.
La muestra permanecerá hasta el sábado 30 de junio, con entrada gratuita, de lunes a sábado entre las 10 y las 20 horas.